Cuba: Vivir entre ciclones
Proyección 10 diciembre 2019
De la productora Jean Stubbs
La Habana estaba viva en diciembre 2019 para el 44e Festival Internacional de Cine. El Hotel Nacional de nuevo acogió una mezcla de cineastas y aficionados en sus patios y sus jardines, y los grandes cines de la ciudad estuvieron repletos. Teniendo el Festival como su enfoque América Latina, películas de Argentina, Brasil, Chile y Mexico tanto como Cuba fueron entre las premiadas. Siempre prevíamos que, en comparación, nuestra proyección para lanzar Cuba: Vivir entre ciclones sería un pequeño evento lateral. Filmabamos en Cuba en junio/julio de 2019; durante el verano estabamos envueltos en el trabajo de edición en el Reino Unido y no había forma de someter el documental antes de la fecha de entrega del Festival en agosto; y en octubre, cuando regresamos con el primer corte, los organizadores enfrentaban las incertidumbres de cortes energéticos, y no sabían cuantos cines tendrían funcionando en diciembre. No obstante, para nosotros fue importante estar allí, para proyectar el documental con quienes habían colaborado con nosotros y divulgar el hecho que el documental estaba terminado, estaría disponible en línea con acceso libre, y estaríamos programando proyecciones futuras durante el próximo año. Además, nuestro director Michael Chanan estaba programado por el Festival para hablar sobre el legendario documentalista cubano Santiago Alvarez, cuya herencia había influido en su propio trabajo, y los organizadores del Festival igual nos acreditaron.
Embarcamos, pues, en organizar nuestra propia proyección. En octubre, visitamos ARTeHOTEL, recientemente abierto por Héctor Garrido, fotógrafo español, y la actriz cubana Laura de la Uz. Vimos sus facilidades para la proyección, con capacidad de unas 40 personas sentadas, y nos hablaron de poder ofrecer una recepción después. Fue una garantía para nosotros. También queríamos que quienes de Caibarién habían participado en la filmación pudieran estar presentes, y logramos garantizar su transporte y alojamiento en La Habana. Resultó ser que otros que vinieron fueron también de Caibarién, algunos viviendo en La Habana y una más lejana de Paris, y ahora estamos en contacto con ellos, como otros, para futuras proyecciones y debates sobre los temas tratados en el documental.
Nos fue particularmente grato tener con nosotros Liliana Núñez Velis, presidenta de la Fundación Antonio Núñez Jiménez para la Naturaleza y el Hombre, que fue nuestra institución anfitriona, y Anthony Stokes, el embajador británico en Cuba, para decir unas palabras de apertura. La Embajada Británica ayudó en los trabajos de recuperación después de Huracán Irma y tiene el cambio climático como una de las prioridades en su trabajo con Cuba. En este ámbito, nosotros y la Fundación esperamos desarrollar futuras iniciativas conjuntas con la Embajada.
También tuvimos un panel después de la proyección con dos críticos de cine, Juan Antonio García Borrero (Juany), de Camagüey, y Maria Luisa Ortega, de España. Ambos reflexionaron sobre como el documental les había hecho pensar en cuestiones que inciden en sus propios contornos: Juany sobre pueblos pequeños cubanos pasado y presente; y Maria Luisa sobre la vulnerabilidad de regiones de España que dependen del turismo como las Islas Canarias. El debate luego tornó en los pros y los contras de como divulgar el documental y discusión sobre ello en la televisión y los medios sociales y en comunidades – un desafío que salimos con ganas de enfrentar durante el transcurso de 2020.